I.E. Ciudad de Asís

Puerto Asís, 29 de noviembre de 2024

En un emotivo acto que se ha convertido en una tradición institucional, los estudiantes del grado once de la Institución Educativa Ciudad de Asís entregaron los símbolos representativos de la filosofía franciscana a los niños de preescolar. Este evento, organizado por los estudiantes y directores del grado once, busca fomentar el sentido de pertenencia y promover los valores fundamentales en toda la comunidad educativa.

El acto se inició con un elegante desfile en el que cada estudiante de once acompañó a un pequeño de la mano, mientras otros formaban una calle de honor para despedir a los graduandos. Entre los símbolos entregados se encontraban la Biblia y los pilares de la filosofía franciscana: Jesucristo, María, San Francisco de Asís, la Beata Madre Caridad Brader, el árbol, el libro, el uniforme, la antorcha, el bastón mayor (banda de paz), la banda de personería, la paloma, el escudo y la bandera. Estos símbolo son el fundamento del quehacer pedagógico de la IECA. Cada símbolo fue entregado con un breve discurso por parte de los estudiantes de grado once, mientras los pequeños expresaban su gratitud en sencillas pero significativas palabras.

El programa estuvo cargado de momentos memorables. La Coordinadora Académica, Cristina Medina, dio las palabras de apertura, destacando la importancia del evento como un legado que refuerza los lazos comunitarios. Posteriormente, el grupo musical de la IECA deleitó a los presentes con canciones interpretadas por la talentosa estudiante Yarleidy Canamejoy, del grado noveno, como un homenaje especial a la promoción 2024.

La puesta en escena de la Banda de Paz protagonizó una presentación inolvidable que cautivó a todos los asistentes con sus hermosas melodías. Bajo la dirección de Pedro Pablo Narváez, los estudiantes demostraron su talento y dedicación en una muestra musical que resonó como un verdadero tributo al esfuerzo y la armonía.

El director Narváez expresó su profundo agradecimiento a los estudiantes por su compromiso en este importante proyecto, destacando la labor de los integrantes del grado once, quienes con esta presentación cerraron su participación en la banda. "Ellos han dejado una huella imborrable con su trabajo y dedicación a lo largo de los años," señaló.

La presentación no solo fue un despliegue de talento, sino también una muestra del impacto positivo que este proyecto tiene en la formación integral de los estudiantes, fortaleciendo valores como la disciplina, el trabajo en equipo y el amor por la música

Laura Zambrano, estudiante del grado once A, brindó unas emotivas palabras a sus compañeros, docentes y demás estudiantes, resaltando los valores que los han guiado durante su trayectoria escolar. El rector de la institución, el Diácono Fernando Herrera Narváez, compartió un inspirador mensaje basado en el lema del escudo institucional: “Esperanza, Ciencia y Libertad”, deseando éxitos y bendiciones para los futuros graduados.

 Uno de los momentos más simbólicos fue el último llamado a lista y el último timbre, un acto que durante años marcó el inicio de cada jornada escolar y que esta vez sirvió como despedida. En un círculo cargado de emociones, los estudiantes del grado once entonaron canciones, se abrazaron y celebraron con saltos, bailes y gritos, compartiendo así una mezcla de alegría y nostalgia.

El evento también incluyó un espacio espiritual liderado por los docentes, quienes representaron el nacimiento del Niño Jesús y desarrollaron la novena. Los apartes de la novena fueron acompañados por hermosos villancicos, interpretados por los docentes de música, creando un ambiente lleno de paz y reflexión.

Con la bendición de Dios y un profundo sentido de espiritualidad, la IECA despidió a sus estudiantes del grado once, cerrando el año escolar con alegría y reafirmando los valores que guían la formación integral de su comunidad educativa.

Este acto no solo marcó el final de una etapa para los graduandos, sino también dejó una huella imborrable en el corazón de todos los presentes.